Secretum meum mihi, entre otros medios, recoge la carta que
la Federación Internacional Una Voce ha
publicado, en ocasión del comienzo de los trabajos de revisión del Misal del 62
que la Comisión Ecclesia Dei está preparando.
Ciertamente el Papa Benedicto, en la carta que acompaña al
Motu Proprio Summorum Pontificum, deja abierta la posibilidad de incorporar los
santos canonizados desde el año 1.962 en adelante, además de incorporar algunos
de los nuevos prefacios, pero lo que la FIUV se huele es que, ya que el
Pisuerga pasa por Valladolid, se aproveche la ocasión para meter la pluma en el
Misal y asistamos a una versión 62.1,
adaptada a los tiempos, con resultados nada bueno. De ahí el temor suscitado
por dicha reforma.
Revisar un Misal que, por una parte, todavía no se ha
implementado en la mayoría de las diócesis y que cuenta, además, con la
oposición efectiva de un gran sector de la Iglesia, y no precisamente de
aquél tildado como «progresista», no
parece que tenga mucho sentido. Además, habría que añadir que, vistos los
estragos ocasionados por el huracán – reformista – litúrgico del año 1.969 y
que los propios fieles que asisten al
Usus Antiquior – en general, con una gran sensibilidad litúrgica – no han dicho
ni mú al respecto, es lógico que, en cierta manera, se levante la guardia, o
dicho de otra forma, Virgencita, que me quede como estoy.
Personalmente pienso que una reforma no tiene por qué ser
mala. Eso sí, para hacerla de una manera cabal, a mi modesto modo de ver, creo
que lo más razonable sería volver al punto de inicio en el cual se empezó a
retocar el Misal, es decir, al año en el que se realizaron los cambios en la
Semana Santa y, a partir de ahí, iniciar el proceso lento,
orgánico, de modificación del Misal en las cosas que realmente sean necesarias,
incorporando los aciertos – que no siempre tienen que dar lugar a
modificaciones. Pienso en las doce lecturas de la Vigilia Pascual, lecturas que
han desaparecido en el Misal del año 1.962 -, y desechando los numerosos
errores, todo sin urgencias.
Como se puede comprobar, los vientos de cambios, siguen
soplando. Que el Señor nos libre de
nuevas tormentas.
6 comentarios:
Muy oportuno y atinado su post, Isaac. He invertido $180 en misales del 62 para mi familia y para mí, es decir, 3 misales. Pero hay familias de 5,6, 8 , 12 miembros y todos con misal.
No es como los misales novusordo con esas horrendas cubiertas de art "kitsch" y que son como kleenex, de úsese y tírese. Están hechos con papel reciclado y cambian cada año. En cambio los misales tridentinos están hechos en papel fino, cantos, dorados y en piel. Y son para toda la vida. Hasta allí no ha llegado la sociedad del McDonalds.
Yo conservo mi misal del 62 como un tesoro y no me emocionan las comaladas de santos que se declararon en el larguiiiiiiiiiiiiiiiiísimo pontificado del beato magno Wojtyla. Con excepción del venerable padre Pío y algún otro. Si ésa es la idea, que pongan en el sitio del Vaticano las hojitas de los santos que quieran agregar, se imprimen en nuestra impresora y se agregan o no se agregan. Y dejarlo estar.
Porque algo me huele a podrido en Dinamarca y parece que algún enemigo quiera revolcar el agua. Todo el apoyo para UnaVoce. Y que se dediquen primero a hacer cumplir el Summorum Pontificum, cuidar las milongas de los kikos y vigilar los abusos del novusordo, que bastante falta hace. El diablo nunca duerme. Saludos y gracias por sonar la alarma.
No van a respetar nada, acabarán destrozando el misal y hasta la propia Misa. No es mas que asunto de lógica.
No te creas, amigo Antonius. El novusordo establishment está tocando fondo y aunque sus números son abundantes, la gente no tiene ya la devoción de antaño. Pocos son los fieles que viven como debe vivir un católico.
A la comunidad tradicional de Inglaterra les querían imponer algunos cambios a la Misa tridentina y todos en bloque amenazaron pasarse a la SSPX. Y se callaron. A grandes males, grandes remedios.
Pues si solo con la amenaza se callaron entonces si hubieran hecho efectiva la amenaza definitivamente las cosas cambiarían. Buen punto a tener en cuenta. Saludos amigo.
El problema de una voce es que limitan el problema liturgico a una mera cuestion de gustos y preferencias y se cuelan el camello de las herejias que muchos, es decir lo doctrinal, con tal de que él obispo no les de palos (báculos?).ahí los tienen haciéndole palmas a ricard y a vign-trois (o algo así) por que les celebran una que otra misa, son de lo más políticamente correctos pues a la misa tradicional le dicen el usus antiquor o vetus ordo, él misal es el de juan xxiii,y cuando ud entra a sus páginas se encuentra con la advertencia de que ellos no son cismaticos... No dudo que han hecho un gran trabajo por la difusión de la liturgia tradicional y también tienen que cargar la cruz de uno que otro cura y obispo modernon, aunque gente como la de cuba han demostrado tener agallas. Sí el problema fuera sólo de gustos litúrgicos mons lefebvre habría firmado el arreglo en el 88...
Alberto, no entiendo el error en llamar usus antiquor (uso mas antiguo) o vetus ordo (viejo ordo) contrapuesto al novus ordo (ordo nuevo) o misal de Juan XXIII siendo este el papa que ordenó/aprobó las ultimas modificaciones al misal de 1962 el cual es usado tanto por las comunidades regidas por la Comisión Ecclesia Dei como por la FSSPX. Para Una Voce la defensa de la misa tradicional no es una cuestión de “gustos o preferencias estéticas” sino una convicción surgida desde antes de la promulgación del Novus Ordo Missae por preservar y transmitir integramente la tradición liturgica tal cual fue recibida por nuestros antepasados para poder difundirla a las nuevas generaciones. Le recuerdo que la Federación Internacional Una Voce es la primera y mas antigua organización (tanto laical como clerical) que ha defendido la Santa Misa tradicional, asi como el uso de la lengua latina y la musica sacra dentro de la Iglesia y que uno de sus mas insignes presidentes Michael Davis escribió multiples articulos y editoriales en revistas asi como libros acerca de los problemas derivados de la Misa Nueva asi como del Concilio Vaticano II y defendiendo también a Monseñor Lefevbre.
Le dejo una liga del website de la FIUV donde vienen algunos de los libros de Michael Davis y el listado completo de sus obras http://www.fiuv.org/dossier_davies.html
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